Un lugar emblemático que merece con pleno derecho colocarse como la entrada 200 de nuestro blog.
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Cuenta con 9 mesas, WC, parque infantil enorme, el más completo y original que hemos visto, un sueño para los más pequeños; playa con acceso directo desde el área, de arena fina y aguas limpias y tranquilas, especialmente apropiada para los niños, además es una de las pocas protegida del desagradable viento nordeste; grandes campas, cafetería, chiringuito, recinto de leones marinos y pingüinos, vistas, sombra.
Este espacio recreativo es muy conocido y utilizado por todos los cántabros, que disfrutan de todas las posibilidades de recreo y descanso que ofrece, pero puede ser un descubrimiento para visitantes de otras zonas.
La única dificultad que presenta es que hay que acercarse a pie, es una dificultad (con niños, la comida, las toallas,...) y al tiempo su mayor encanto; el aparcamiento más cercano es el del Camello, muy saturado en verano.
Entrada a la playa de Bikinis, donde las campas se funden con la arena y los árboles crecen en su perímetro, dando la impresión de una playa caribeña.
Fabulosas vistas de la playa de Bikinis y la isla de Los Ratones. |
Datos de interés
Pequeño zoo
Se trata de un espacio especialmente acondicionado para leones marinos y pingüinos, con dos piscinas naturales, donde se puede observar a los animales de cerca, sin molestarlos, y al tiempo disfrutar de una espléndida vista hacia El Camello, la isla de Mouro y El Sardinero.
La entrada es gratuita.
Palacio de la Magdalena
Foto extraída de http://www.guiadejardin.com/2013/01/casas-de-pelicula-gran-hotel.html
Obra de los arquitectos Javier González Riancho y Gonzalo Bringas Vega
El palacio está situado en la península de La Magdalena, un parque periurbano de carácter público que actúa de eje entre los espacios marítimos de El Sardinero y la zona centro, donde destaca el ámbito del paseo y los jardines Pereda. La península, situada en una de las bocas de la bahía de Santander, destaca por su vegetación boscosa. Cuenta también con una playa, la de La Magdalena, un minizoo y un parque de recreo infantil, además de diversas edificaciones.
Se trata de una obra de estilo ecléctico, que combina influencias inglesas, patentes en la disposición de las masas exteriores, abundancia de las chimeneas, forma de los ventanales, etc., con aportes de estilo francés, como la escalinata de doble tramo de la escalera principal, la asimetría de los cuerpos del edificio, etcétera, además de trazas tomadas de la arquitectura barroca montañesa. Su construcción popularizó un subestilo ecléctico-regionalista en Cantabria, cuyo mayor exponente es el mismo palacio, y que parte del palacio pintoresquista inglés de los Hornillos.
El esquema planimétrico se basa en un cuerpo alargado de 91x21 m., con otro que sale al norte, de 20 m. de lado. Sus alzados son asimétricos y la multitud de entrantes y salientes dan la sensación de que consta de varios cuerpos maclados.
Consta de dos entradas, una al Norte para carruajes, con pórtico, y otra al Sur, que es la principal, con dos torreones de planta octogonal y una escalinata de dobles tramos. El edificio es de piedra de mampostería procedente de Cueto, y tiene cubiertas de pizarra. En el interior destacan los salones de recepción conservando algunos cuadros de interés, de autores como Benedito, Sorolla, Sotomayor, etc. La mesa del comedor, de madera, es una de las más largas de España, y sirvió en una ocasión para grabar un anuncio de un limpiador, en el cual un hombre se tiraba sobre ella y se desplazaba resbalando hasta el final.
extraído de http://es.wikipedia.org/wiki/Palacio_de_La_Magdalena
El madaleno
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